La maldad impera en el mundo y los hombres impíos hacen planes para dañar y destruir al justo. Ante esta realidad el salmista se pregunta: “El que hizo el oído, ¿No oirá?, el que formó el ojo ¿no verá?” (Salmo 94:9).
Muchos planes de maldad en secreto pueden hacer los hombres, con la intención de destruirte, solo porque eres diferente y tienes principios y convicciones propias, pero recuerda que los únicos planes que prosperan son los planes de JEHOVA y como vemos en el libro de Isaías 54:17, “ninguna arma forjada contra ti prosperará”.
Después de la entrada del pecado a este mundo, como resultado de la desobediencia de nuestros primeros padres Adán y Eva, a las instrucciones dadas por DIOS, y su expresa orden de no comer del árbol del conocimiento del bien y del mal, la bondad y la verdad fueron desplazadas y la maldad y la mentira ocuparon su lugar, no solo en el mundo, sino también en el corazón de los hombres.
Desde el mismo principio la Biblia presenta que Caín quien era el primer hijo de Adán y Eva, hizo planes de maldad y mató a su hermano Abel (Génesis 4:8). ¿Por qué Abel fue asesinado por Caín? Porque las obras de Abel eran justas y las de Caín no (1Juan 3:12).
En este mundo de maldad el justo y sus obras son motivos suficientes, para que el impío en secreto diseñe planes de destrucción contra él.
En el tiempo del cautiverio de Israel en tierra de Babilonia, se presenta un retrato fiel de las intrigas del impío contra el justo (Libro de Ester). Un hombre llamado Amán llegó a ser engrandecido por el rey del imperio su nombre era Asuero, había un hombre con ningún “rango” al cual llamaban Mardoqueo , este siempre estaba a las puertas del palacio bridando sus servicios y Amán en la soberbia del cargo que ocupaba, entendía que todos debían arrodillarse ante él en señal de respeto y veneración (se sentía ser una especie de dios), pero Mardoqueo aunque no tenía rangos, ni cargos, tenía principios y convicciones superiores, que les impedían arrodillarse en veneración ante otro hombre, y eso tuvo sus consecuencias, pues generó el rechazo y odio de Amán, quien en secreto diseñó un plan para matar a Mardoqueo .
Preparó una horca para colgarlo, y así dar un ejemplo, para todo aquel que se atreviera a desafiar su “autoridad”. Pero la gran verdad es que el DIOS que oye y ve, siempre viene al auxilio del justo.
El relato bíblico concluye presentando, que quien terminó colgado en la horca fue el mismo que la diseñó, Amán.
Aunque te hayan hecho mal, no hagas horca contra nadie, ni organices planes de maldad, no sea que la maldad te alcance y termines como Amán muriendo en tu propia horca.
No tienes que temer a los hombres que en oculto hacen planes de maldad para dañarte, o destruirte, recuerda que JEHOVA es tu protector y El oye y ve lo que el hombre hace en secreto contra ti, y trastorna sus planes.
Te invito a que te apartes del mal y hagas el bien, porque así vivirás en la tierra con seguridad, pues JEHOVA es quien oye y ve, y como DIOS es quien preserva la vida del justo.