Hablando de la misericordia de DIOS el salmista destaca que eso debe ser motivo de nuestra alabanza (Salmo103:1-4), “Bendice, alma mía, a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios. Él es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias; El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias”.
La palabra misericordia aparece más 250 veces en las Escrituras, y esta expresa el concepto de gracia inmerecida, un concepto expuesto de manera reiterada por los escritores del Nuevo Testamento. El apóstol Pablo nos invita que, ante la realidad de tener un sumo sacerdote, que se compadece de nosotros en nuestras debilidades, debemos acercarnos al trono de la gracia confiadamente, para alcanzar misericordia y hallar gracia para encontrar oportuno socorro (Hebreos 4:15).
Misericordia y oportuno socorro fue lo que recibió la mujer que fue llevada a los pies de JESUS, con la acusación de una violación moral, era acusada de adulterio o fornicación en su caso (Juan 8). Esta mujer según la ley de los judíos, por su falta moral, merecía sentencia de muerte, la cual se ejecutaba por lapidación es decir la persona era apedreada,..Wuao… que muerte cruel se aplicaba en ese tiempo al que se veía involucrado o cometía esa falta moral.
Sin importar el castigo que se aplicara tanto en ese tiempo como ahora, el pecado tiene establecido por ley natural, que la paga o resultado final del que lo practica es la muerte.
Los hombres acusaban a esta mujer por su pecado y estaban tan enfocados en el pecado de ella, que pasaron por alto que ellos también eran pecadores. JESUS con las palabras dirigidas a ellos, quiso hacerles conciencia de su realidad, “el que esté libre de pecado que tire la primera piedra”.
A esta mujer su pecado la había llevado a un aparente encierro, los hombres la acusaban, la ley la condenaba a muerte, pero su real solución estaba frente a ella, JESUS… JESUS.
Todos nosotros somos pecadores y también merecemos la muerte, pero la misericordia de JESUS, así como lo hizo con esta mujer, está disponible hoy también para TI, pues la Palabra señala: “Que DIOS quien es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando muertos en vuestros delitos y pecados, nos dio vida, juntamente con CRISTO. Por gracia habéis sido salvos” (Efesios 2:4-5).
DIOS no te trata como merecen tus iniquidades, ni te paga conforme a tus pecados, sino que hoy te dice como le dijo a la mujer traída ante ÉL, por su pecado pasado, “VETE Y NO PEQUES MÁS”
Hoy es un día para prodigar la misericordia de DIOS, siguiendo el principio de Mateo 10:8, “De gracia recibisteis, dad de gracia,”
En este mismo instante te invito a que alabes a DIOS porque, Él es quien perdona todas tus iniquidades. El que sana todas tus dolencias. El que rescata tu vida del hoyo del pecado, Coronándote de favores y de sus misericordias”.